Pedro Sánchez ha calentado la precampaña de las elecciones en Cataluña, convocadas para el próximo 12 de mayo. El anuncio de tomar la decisión el próximo lunes, 29 de abril, sobre su dimisión por la denuncia de Manos Limpias contra su esposa, Begoña Gómez, ha avivado el debate en Cataluña, pero también desviado la atención sobre cuestiones clave, como la amnistía a Carles Puigdemont y al resto de líderes independentistas investigados por terrorismo y malversación, entre otros delitos.
Pedro Sánchez ha mostrado por carta a la ciudadanía, publicada en Twitter, un relato victimista no visto jamás en democracia. Ferraz lleva meses con la cantinela del miedo a la derecha y la ultraderecha, como si del Doberman de la campaña del 96 se tratara. No obstante, es ahora cuando el presidente del Gobierno ha vuelto hacer gala de una supuesta persecución contra él a través de su esposa con informaciones publicadas en medios de comunicación. El jefe del Ejecutivo no ha realizado ninguna declaración pública e institucional, ni usado la cuenta de ningún Ministerio ni organismo oficial para montar un relato que le deja como una persona debilitada ante la denuncia contra Gómez.
La misiva ha hecho mover ficha en el PSC, tocado por el anuncio de Sánchez, quien no acudirá al inicio de la campaña electoral del 12-M. La formación ha convocado una Ejecutiva extraordinaria para este jueves en Sabadell (Barcelona). A la reunión de urgencia acudirán los primeros secretarios de las federaciones y tendrá lugar por la tarde, justo antes del inicio de la campaña.
EL HECHO INSÓLITO DE ANUNCIAR CUÁNDO TOMARÁ LA DECISIÓN
A su juicio, la vía de usar la red social Twitter es la mejor para expresar su opinión. «La gravedad de los ataques que estamos recibiendo mi esposa y yo, y la necesidad de dar una respuesta sosegada, me hacen pensar que esta es la mejor vía para expresar mi opinión», ha afirmado. A esta red social acceden en España cerca de 10,8 millones de perfiles, pero muchos de ellos son utilizados por empresas. De hecho, los jubilados no suelen entrar en esta red social. «Se dirige especialmente a jóvenes y personas de mediana edad», apunta un experto en comunicación consultado por este medio.
«Es un hecho sin precedentes en democracia», destacan sobre el anuncio para fijar la fecha para tomar la decisión de mantenerse o abandonar el cargo, que dejaría a España al borde de unas nuevas elecciones generales, previsiblemente para otoño.
Las lecturas de la carta victimista de Pedro Sánchez se centran en dos claves. Una de ellas es si dimitirá en plena campaña electoral catalana, provocando un terremoto político y dirigiendo la atención hacia Ferraz y La Moncloa; la otra es qué ocurrirá si finalmente convierte ese «no lo sé» en una renuncia. El golpe de efecto podría ofrecer un vuelco en las urnas, más cuando Salvador Illa confía en Sánchez más que en su jefe de gabinete, quien no informó de sus tres reuniones con Koldo García, el hombre clave en la trama de los contratos públicos con las mascarillas.
Son demasiadas incógnitas y escenarios los que se abren ahora. Si se mantiene en La Moncloa, podría haber adelanto electoral según el resultado en Cataluña; si dimite cabría la posibilidad de mantener al PSOE en el poder con un Gobierno interino y sometido a una cuestión de confianza, un hecho que se produciría también en caso de seguir al frente del Ejecutivo.
De adelantar elecciones el próximo lunes, los españoles volverían a las urnas en pleno mes de julio, como el pasado año, convirtiendo a España en un país italianizado, donde no hay un Gobierno que aguante el tiempo estipulado por las urnas.
LA INVESTIGACIÓN SOBRE BEGOÑA GÓMEZ EN PLENA PRECAMPAÑA CATALANA
Los afines a Pedro Sánchez denuncian una campaña de acoso contra su mujer, a pesar de la multitud de informaciones publicadas hasta ahora, sin preguntarse si son ciertas o no. Para Sánchez son falsas, mientras un juez investiga la denuncia, a la que ha tenido acceso MONCLOA. Para los socialistas, «no todo vale en política», pero ellos mismos han llevado a cabo estas campañas de acoso y derribo contra la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, por un caso ajeno a ella y que afecta a su novio.
La misiva remitida a la ciudadanía ha provocado una encendida defensa por su personal más cercano, como Teresa Ribera y Santos Cerdán, así como el propio Illa y Patxi López. «Tenemos un presidente de primera. Ni él ni su familia merecen esto. Pero España tampoco. Una abrazo enorme, presidente», afirma la candidata socialista al Parlamento Europeo.
«No hay línea roja que la derecha de este país no esté dispuesta a cruzar. No todo vale, ni en la vida, ni en la política. España no se lo merece, y su democracia, tampoco. La verdad siempre se abre camino», ha asegurado el número tres del PSOE y la persona que introdujo a Koldo en la formación, Santos Cerdán.
EL PSOE ARROPA A PEDRO SÁNCHEZ
«Todos los socialistas del PSC estamos contigo», asegura Salvador Illa. Para Pilar Alegría, no es Pedro Sánchez ni su destrucción política y personal o la de su familia. O no sólo es eso. Es sobre todo el empeño de la derecha en invalidar un gobierno progresista legítimo porque entienden que el poder les pertenece», aseguró la ministra Pilar Alegría. Reyes Maroto, la líder del PSOE en la ciudad de Madrid, se suma a las quejas. «Hay límites que no se pueden sobrepasar», indica.
Sánchez pretende darnos pena y, efectivamente, da pena
«¡No pasarán!», es la frase de apoyo de Patxi López ha concluido su mensaje recordando el famoso lema pronunciado por el bando republicano en la defensa de Madrid durante la Guerra Civil.
Para el PSOE y los dirigentes de la formación, las acusaciones, como la demanda de Manos Limpias contra Begoña Gómez, no es más que una estrategia para no asumir el resultado electoral del 23-J. No es la primera vez que los socialistas utilizan este discurso. Lo hicieron la precampaña y campaña de las pasadas elecciones generales, como también en las sesiones de investidura.
El candidato del PP a las elecciones catalanas, Alejandro Fernández, ha respondido al anuncio del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de cancelar su agenda para reflexionar si continúa al frente del Ejecutivo tras las investigaciones a su esposa, Begoña Gómez, «Sánchez pretende darnos pena y, efectivamente, da pena».
EL PP Y VOX DESCONFÍAN DE LAS INTENCIONES DE PEDRO SÁNCHEZ
En Génova 13 desconfían del mensaje de Pedro Sánchez, «una maniobra rastrera para tratar de señalar a la derecha» y poder generar una mayor incertidumbre en las filas ‘populares’, presentándoles como unas hienas en busca de carroña. Las voces consultadas apuntan que se trata de un acto de precampaña, de cara a las catalanas, para volver a enviar un mensaje victimista e impropio de un presidente del Gobierno.
«Es la primera vez en democracia que un presidente anuncia que no sabe qué hacer. Inaudito. La sola duda debería bastar para dimitir», señalan. «Una decisión así no se toma a la ligera, pero ni mucho menos se anuncia al público y menos en redes sociales», profundizan. Cabe recordar que el único presidente del Gobierno que ha dimitido en democracia fue Adolfo Suárez, pero lo hizo en directo, tras sopesar la decisión. «No la anunció como ha hecho Pedro Sánchez», indican.
En Génova 13 no pasan por alto las calumnias de Pedro Sánchez contra Feijóo, como tampoco que el motivo real de la suspensión de la agenda sean ellos ni los medios de comunicación, más cuando la decisión de investigar a Begoña Gómez no se produce por la denuncia en sí, sino por las acusaciones e indicios contra la esposa del jefe del Ejecutivo.
Sánchez no ha dado respuesta sobre la acusación contra Begoña Gómez, pero su victimismo constituye en sí la alimentación de la confrontación contra el PP, como también Vox, que considera que no habrá dimisión y que solo se victimiza para ocultar la corrupción.
