El dolor en las articulaciones es una afección que presentan millones de personas en todo el mundo, especialmente los adultos mayores. Con el pasar de los años, el organismo puede representar algunas deficiencias y problemas. Esto puede deberse a distintos factores como lesiones, desgaste o, muy comúnmente, por la deficiencia de alguna vitamina.
Es común pensar que si existe algún dolor o molestia en las articulaciones, esto se deba a una lesión, pero la verdad es que en muchas ocasiones no tiene nada que ver con esto. Para su correcto funcionamiento, las articulaciones requieren de ciertos nutrientes que las mantienen fuertes y sanas. Tal es el caso de la vitamina D, que cumple una función importante en el bienestar del organismo.
Los beneficios de la vitamina D para el dolor
Aunque existen muchos analgésicos, algunas vitaminas pueden ser muy efectivas para calmar el dolor crónico en algunas zonas del cuerpo y este es el caso de la vitamina D. De hecho, esta suele ser utilizada en pacientes con patologías como artritis reumatoide, osteoporosis, migrañas y con dolores de espalda. De esta manera, tener buenos niveles de vitamina D puede ayudar significativamente en el alivio de dolores articulares. Pero, ¿cómo debemos tomarla?
El consumo de vitamina D en los seres humanos suele ser de forma natural a través de la alimentación y la toma de sol saludable. Sin embargo, en ocasiones esto no es suficiente, ya que es muy común presentar deficiencia de esta vitamina. Por esta razón, una buena alternativa es consumirla a través de suplementos que nos ayuden a elevar su presencia en nuestro de manera más rápida y efectiva.
Dónde encontramos la vitamina D
Sin importar si elegimos o no tomar un suplemento, cuidar la alimentación es esencial, de tal manera que debemos conocer cuáles son aquellos alimentos ricos en vitamina D que no solo nos ayudarán a combatir los dolores, sino que protegerán la salud de nuestros huesos y nos brindaran un sistema inmunológico en mejores condiciones para evitar infecciones o virus.
Pescados como el salmón, el atún y la caballa son ricos en esta vitamina. También podemos encontrar altas concentraciones en alimentos como el hígado vacuno y el huevo. Además, frutas como el aguacate, la naranja y el plátano tienen un alto contenido de esta vitamina, por lo que podemos incluirlas en nuestra alimentación diaria para así ver efectos positivos contra el dolor en las articulaciones.
